S'ha actualitzat la pestanya de RIO 2013.

DÍA 27 BARAJAS -> MADRID 15Km



Papis, mamis... ¡EL PAPA ME HA MIRADO!

Todo el esfuerzo ha valido la pena, pero empecemos por el principio. 
Esta mañana, todos los peregrinos nos hemos despertado con una mezcla de sentimientos: Alegría, por ser el último madrugón, Emoción porque por fin después de 701km vamos ha llegar a nuestro destino: Madrid, la Almudena, el Papa... Y también con tristeza y cierta nostalgia al darnos cuenta de que el viaje que llevamos 3 años preparando estaba a punto de acabar.

Hemos empezado la última etapa (la 27ª) a las 6:30h. No ha sido una jornada más, no solo porque llegamos a Madrid, sino porque el grupo se ha ampliado de131 a 350 peregrinos con la llegada de nuestros padres, la presencia del comité de organización y nuestro estimado cocinero, ¡Ebay!

Los peregrinos (que ya llevábamos un ritmo vertiginoso) hemos amoldado el paso al de nuestros padres, y así encabezados por nuestro gran cura “el brillante” hemos llegado a la esperada Almudena.

La entrada, como no podía ser de otra forma, ha sido Triunfal, algo apoteósico, legendario, redoble de tambores... Mauge entonaba “el Dios te salve María”. Los 350 restantes la seguíamos a voz en grito, y poco a poco las voces se han ido apagando invadidas por la emoción. Y, aunque no lo sabíamos, esto no había hecho más que empezar.

Durante la santa misa hemos tenido el privilegio de sentarnos todos justo delante del altar, a pocos metros de nuestra querida Virgen Reina de la Almudena. El rector nos ha dirigido unas palabras de apoyo, felicitándonos también por nuestro esfuerzo, al igual que Mn. Ferran que además nos ha recordado que lo más importante está aún por llegar: ahora empiezan las Jornadas, el encuentro con Cristo, la conversión personal.

La mente de muchos peregrinos volvió a Polonia al besar la imagen de la Virgen, recordando con cuánta fe le pedimos y rogamos que este sueño se hiciera realidad. Y así a sido, una vez más nuestra Madre no ha decepcionado. En acción de gracias, hemos dejado a sus pies todas nuestras peticiones e intenciones y, sobre todo, encomendar especialmente a todos los que han hecho posible este viaje.

Para celebrarlo, los PSP (espero que a estas alturas ya sepáis lo que significa, pero por si acaso lo repetiré una vez más: Peregrinos Sin Padres) han disfrutado de un picnic en un parque cercano. Y, como dice Alicia, han pasado de llamarse PSP a PSH (Peregrinos Sin Helado), al ver con recelo como el resto volvía de sus comidas familiares con helados en mano.

A las 16h hemos salido camino a la Cibeles para dar la bienvenida al Santo Padre. Hemos establecido el campamento base justo en frente de una pantalla, pero los jóvenes (con la adrenalina a mil) no nos hemos conformado y ni cortos ni perezosos hemos salido a la aventura en busca de un sitio más cercano al escenario principal. No era muy difícil no contagiarse del ambiente fiestero y juvenil del acontecimiento, y canciones como la Macarena o Danza Kuduro no hacían más que ayudar. Igualmente, por
supuesto, el grito más entonado no dejó de ser “Viva el Papa”.

A esas horas el calor era asfixiante, pero por suerte entre baile y baile los bomberos nos refrescaban a mangerazo limpio. Sobre las 19:30h, entre aplausos, gritos y aclamaciones, el Papa llegó a la Cibeles. Y gracias al liderazgo de Víctor y la experiencia de Santi, conseguimos llegar  a la preciada barandilla (comiéndonos por el camino a varias personas, seamos sinceros) para saludar lo más cerca posible a nuestra Santidad. Y no, no tenemos remordimiento alguno, ¡el Papa nos miró!

Católicos del mundo entero escuchamos al Papa, que aprovechó la ocasión para recordarnos que no hay libertad sin Dios, que para conocer a Jesús debemos profundizar en el Evangelio, que una vida no edificada en Cristo jamás alcanzará la felicidad y que imitemos a la Virgen, que supo decir sí a la voluntad de Dios. El mensaje del Santo Padre fue claro y directo, pensado y dirigido a todos nuestros corazones. Y por las expresiones y sonrisas de los presentes, logró llegar a ellos.

Tuvimos la suerte de ver a Paz, nuestra violinista, a través de la pantalla. Estábamos tan emocionados y orgullosos que al acabar no hacíamos más que corear “estos son, los músicos del Papa”.

Cansados y agotados, pero muy emocionados, después de cenar regresamos al hotel. ¡Habíamos visto y oído al Papa! Pero también algo contrariados... Hemos finalizado un largo peregrinaje, que llevábamos muchos, muchos, muchos meses preparando, y donde hemos disfrutado y aprendido una barbaridad. Al mismo tiempo, hemos iniciado ya las Jornadas Mundiales, causa y origen de nuestra peregrinación. Y donde tenemos, al igual que el Papa, muchas esperanzas puestas.

                                                                                                                    Marta Durany y Teresa Barroso

1 comentario:

  1. QUINA GRAN CRONICA!!!!!!!!!!!!!

    Moltes felicitats a tots per haver arribat, ara aprofitar la JMJ. MOltes gracies per compartir cada dia les vostres experiencies, ha estat un regal poder-les llegir cada dia desde la altra punta del "charco"!!!!

    Marta, ves a veure a les sisters, tenen una carpa al perque del Retiro, busca a les de bcn (estan Sr. Nita Mary MC, Sr.Clare MC i Sr. Maravilles MC) els hi dius que molts records de part meva i que estic súper bé a Mèxic!!!!! A veure si podem parlar el 23 abans de que marxis a Kolkata!!!!!!!

    no la lieu molt a Madrid!!!!!!!!!!!!!!

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